La “Baja Visión” es la pérdida de agudeza visual y/o campo visual que incapacita para la realización de las tareas de la vida diaria (cocinar, leer, escribir, coser, ver la TV, andar, etc.) Enfermedades como la hipertensión, la diabetes o las patologías oculares como el glaucoma, las cataratas o la DMAE originan un deterioro ocular grave.
Existen ayudas ópticas específicas y tratamientos de rehabilitación visual que permiten aprovechar el resto visual de un paciente con baja visión. Nuestro objetivo es mejorar la funcionalidad y la calidad de vida de estos pacientes.